La Banda Primitiva de Llíria ha dejado de hacer sonar la música por la expansión de la Covid19 en el municipio

El presidente de la Banda Primitiva, José Luis Pérez, envía un mensaje de esperanza a toda la familia clarinera: «Estamos deseando que el Clarín retome su actividad, pero es momento de ser prudentes y responsables»

Desde el pasado 28 de octubre, la Banda Primitiva de Llíria ha dejado de hacer sonar la música. La banda, la banda juvenil, la orquesta sinfónica, la coral polifónica y el grupo de teatro han parado su actividad, como consecuencia de la expansión de la Covid19 en el municipio edetano.

Con una incidencia actual de 442,95 casos por cada 100.000 habitantes, la sociedad ha decidido prorrogar la cancelación de los ensayos de las distintas agrupaciones durante quince días más, hasta el 27 de noviembre incluido. Y, por lo tanto, ha tenido que suspender la programación de actos de Santa Cecília, la patrona de la música.

Por qué motivo habéis decidido prorrogar la suspensión de los ensayos?

Hace quince días, con todo el máximo dolor, decidimos parar la actividad de nuestras agrupaciones por responsabilidad. La situación en Llíria empezaba a ser preocupante. El Ayuntamiento de Llíria aprobó medidas específicas para el municipio y, desde la Banda Primitiva, pensábamos que una institución como la nuestra también tenía que dar ejemplo y tomar todas las medidas necesarias para tratar de frenar la expansión del virus.

Actualmente, la situación en Llíria ha empeorado. Se ha duplicado la tasa de incidencia acumulada en quince días y, por lo tanto, no podíamos tomar una decisión diferente a la de prorrogar la paralización de nuestra actividad. Estamos deseando que el Clarín retome su actividad, pero hay que ser prudentes y responsables.

Esta medida afecta a la celebración de los actos de Santa Cecília.

Evidentemente hemos tenido que cancelar todos los actos programados. Este hecho ha comportado que la decisión haya sido más difícil de tomar porque noviembre es el mes de la música, el mes en que honramos a la patrona de la música y, habitualmente, es un periodo del año con mucha actividad en nuestra sociedad.

Son días de hacer música, de recibir a los nuevos integrantes de las agrupaciones, que tendrán que esperar a ser presentados; de hermandad con la comida de paellas; de salir a la calle con el pasacalle de la Clarinera Mayor y la Corte de Honor; y con la Misa Mayor cantada.

Vivimos muy intensamente el mes de noviembre y es duro tener que renunciar a estas celebraciones, pero entendemos que estamos viviendo un momento extraordinario y que la salud es lo más importante. Aunque tomemos todas las medidas marcadas por las autoridades, como hemos hecho desde el mes de julio, los ensayos y conciertos reúnen en un gran número de personas. A pesar de que las cifras han demostrado que la cultura es segura, creamos que no es momento de tomar riesgos.

Cómo se plantean las próximas semanas?

En esta situación, tenemos que ir analizando como evoluciona la situación. En quince días, la Junta Directiva volverá a reunirse y decidiremos qué hacer. Es evidente que, en el momento que la situación mejore, tenemos que retomar la actividad en unas modalidades u otras, porque es importante que el Clarín abandere el fomento de cultura y el asociacionismo.

Todas y todos estamos deseando poder retomar la actividad de nuestras agrupaciones. Solo quiero mandar un mensaje de esperanza a toda nuestra sociedad (músicos, socios, simpatizantes): la música volverá a sonar y podremos seguir adelante haciendo aquello que mejor sabemos hacer. Haciendo aquello que hace que tantas y tantas personas se identifiquen con una sociedad emblemática como la nuestra y, sobre todo, haciendo disfrutar a todos con el arte de nuestros músicos.