Ayer por la tarde y en el Palau de Congressos, la Orquesta Sinfónica de Peñíscola, fundada en el año 2005 por Salvador García Sorlí, como formación de carácter profesional dentro del seno de la asociación musical Verge de l’Ermitana de Peñíscola, fue la encargada de poner el broche de oro a un certamen, que ya es toda una referencia en la comarca del Baix Maestrat, en lo que al género se refiere.
La OSP logró cautivar a un entusiasmado auditorio que vibró con el excelente repertorio escogido para la ocasión y en el que los contrabajistas Matthew Baker y Gianluca Tavalori actuaron como solistas.
La Sinfónica peñíscolana estrenó, por primera vez en Europa, Toccata for Matt de Andrés Valero-Castells. Se da la circunstancia que el maestro valenciano que ha compuesto esta obra asistió ayer como público al concierto. Los músicos también interpretaron; Passione Amorosa de Giovanni Bottesini, un concierto para dos contrabajos compuesto originalmente para orquesta de cámara y transcrito por encargo para la OSP por Juan Luís Roig Colom. El concierto finalizaba con la Sinfonía nº 7 en La Mayor op. 92 de Ludwing van Beethoven.
Salvador García Sorlí, director de la OSP y del Ciclo de Música Clásica, agradeció “la apuesta de las administraciones local y provincial por la música”, y agradeció al público que confía cada año en el certamen porque “sin duda son nuestro mayor éxito”.